Encuentro

No sé si fue el momento, el lugar,
el azar más puro,
nos colocó en aquel rincón chiquito del tiempo.
Escudriñando tras las gotas quebradas
del bar del momento.
Sutil se deslizó tu eco a mi mirada,
y derrumbé barreras de complejos atoradas.
Se escabulló el reloj entre los alientos,
y se hizo un todo el azucarillo entre tus dedos,
temblorosos dedos.

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